A partir de los cuarenta años la administración de melatonina frena el deterioro que se produce con el envejecimiento y también algunas patologías degenerativas asociadas a la edad, según los resultados de numerosos estudios experimentales. El déficit de melatonina que aparece con la edad es una de las causas de los signos clínicos del estrés oxidativo y nitrosativo.Se ha comprobado que la melatonina que produce la glándula pineal, situada en el centro del cerebro, depura los radicales libres de oxígeno y frena la producción de óxido nítrico, una doble actividad antioxidante y antiinflamatoria que protege del envejecimiento.
Alentados por los hallazgos obtenidos durante años, numerosos expertos invitan a seguir profundizando en el conocimiento de una hormona que podría -en las dosis adecuadas- resultar útil no sólo para el tratamiento de múltiples enfermedades sino también para su prevención efectiva. De hecho es el antirradicalar endógeno más potente que se conoce y se cree que su capacidad antioxidante es 5 veces mayor que la del glutation y más efectiva en la eliminación de los radicales libres que la vitamina E o el ácido ascórbico.
Deja tus comentarios