Comprar medicamentos online o en línea es un práctica cada vez más recurrente en usuarios de todo el mundo. Esta industria se ha desarrollado a pasos agigantados en los últimos años gracias al auge del comercio electrónico el cual ofrece tanto un amplio espectro de medicamentos disponibles como la facilidad de adquirirlos desde casa.
No obstante, esta facilidad también ha traído como consecuencia un aumento proporcional de los riesgos derivados de adquirir fármacos sin receta y en algunas ocasiones hasta de un origen dudoso o poco confiable. Cuando –por el motivo que sea- se ha decidido optar por comprar medicamentos online es necesario tomar las debidas precauciones:
Sé un consumidor cauteloso. Si con la aprobación de tu médico tomas un suplemento como aceite de pescado o calcio, busca el sello de un organismo regulador en botella, entre estos organismos se encuentran la NSF Internacional, Pharmacopeia, ConsumerLab, etc. Estas compañías son contratadas por los fabricantes de los medicamentos para evaluar sus productos en áreas como la seguridad, pureza y precisión de los ingredientes listados en el empaque. Es importante mencionar que dichas compañías no evalúan la eficacia de los fármacos, pero sí pueden garantizarte que el producto no ha sido alterado.
Evalúa los efectos secundarios. Si por ejemplo, has tomado un suplemento y has experimentado síntomas inesperados, es vital que informes de estos síntomas al organismo regulador que opera en tu país, un ejemplo sería la FDA de los Estados Unidos. Incluso una cantidad pequeña de reportes de efectos secundarios no advertidos puede ayudar a llevar un control más eficaz para retirar o controlar la permanencia en el mercado de ciertos productos, sobre todo en aquellos sitios donde se puede comprar medicamentos online sin receta.
Di no a los suplementos. La mayoría de los médicos está de acuerdo en que no existe ningún suplemento de dieta o droga que sea segura a largo plazo. Y más aún, incluso si se pierde peso al usar algún fármaco o suplemento, las investigaciones sugieren que una vez que se deja de tomar el producto, se recuperará el peso con un riesgo añadido de ataque cardiaco. Muchos médicos recomiendan una dieta sana y ejercicio regular como la única forma segura de perder peso y permanecer sano.
Cuidado con los genéricos. La elevada demanda de ciertos medicamentos, por ejemplo los tratamientos para la disfunción eréctil, han favorecido el rápido crecimiento del mercado de los fármacos genéricos, que sostienen contener exactamente el mismo ingrediente activo del fármaco de marca o patente. Sin embargo, este tipo de medicamentos son más susceptibles a ser adulterados puesto que la regulación en ciertos países es muy baja o nula. El consejo más sabio es no comprar en sitios que ofrezcan medicamentos muy por debajo del precio promedio en el mercado y sobre todo evitar consumir fármacos sin receta que nunca antes se hayan tomado, pues existe el riesgo de un daño grave a la salud al desconocer los efectos nocivos y más si se combina con otros tratamientos o padecimientos.
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